Momento de la charla llevada a cabo el pasado 3 de agosto en el Hort Comunitari de Carolines |
El
próximo mes de septiembre es posible, no hay nada preciso en los
trámites parlamentarios, que el anteproyecto de ley del Consell de
la Renta valenciana de Inclusión, elaborado por la DELEGAció
DEL CONSELL PER AL MODEL SOCIAL VALENCIÀ,
llegue, seis meses después de haber sido publicado en el DOGV, a la
Comisión de Asuntos Sociales, donde tiene que pasar el trámite
reglamentario antes de llegar, para su aprobación definitiva, al
pleno de les Corts. Seis meses para recorrer los metros que separan
el carrer Castan Tobeñas (sede de la delegació del consell) de la
Plaça de Sant llorenç (sede de les Corts), todo un prodigio de
rapidez para un asunto de emergencia social como reconoce el mismo
anteproyecto cuando afirma “La nueva pobreza golpeada por la
exclusión del mercado de trabajo, la precariedad laboral, el
agotamiento o carencia de acceso a otras prestaciones, el aumento de
la desigualdad, así como las consecuencias problemáticas que se
producen por la carencia de ingresos básicos, precisan un nuevo
modelo de Renta que favorezca la inclusión social y laboral de las
personas vulnerables en riesgo de exclusión, por estar superada la
actual Renta Garantizada de Ciudadanía por la realidad económica y
técnica de intervención social.”
En
dicha comisión, el anteproyecto, será debatido por los grupos
parlamentarios y por aquellos colectivos sociales que, habiendo
presentado alegaciones, se les permita defenderlas, un trámite solo
testimonial pero que bien llevado y acompañado de agitación
callejera puede cumplir una función pedagógica para defender
propuestas no contempladas en el texto. Propuestas como la Renta
Básica defendida por la Assemblea per la Renda Bàsica al País
Valencià que, de acuerdo con lo previsto, acudirá a la comisión
mencionada.
La
Assemblea per la Renda Bàsica al País Valencià es un espacio de
coordinación de diversos colectivos que defienden la Renta Básica
como la herramienta para combatir la pobreza y las desigualdades
sociales, que junto con otras herramientas, como el reparto de los
trabajos socialmente útiles, permita iniciar un proceso de
transformación hacia otro modelo económico que siente las bases
para salir del capitalismo.
En
julio de 2016 comenzamos una campaña a favor de una Renta básica al
País Valencià, campaña que se inició con una recogida de firmas
que terminó en diciembre del mismo año coincidiendo con la
presentación, por parte del Consell, de su propuesta de Renta
valenciana de Inclusión. Propuesta que una vez analizada por la
Assemblea decidimos rechazar y plantear una alternativa, la cual, sin
ser la Renta básica propiamente dicha consideramos que abriría el
proceso de implantación de la misma en un periodo de diez años.
Otro instante de la charla en el Hort |
Nuestra
propuesta (pulsar enlace para acceder a la misma) la presentamos en
el registro de les Corts el pasado 27 de abril y solicitamos
comparecer en la comisión para defenderla.
Desde
hace unos días, la gente de la Marea roja Alacant-15M-Baladre, hemos
iniciado una serie de charlas para dar a conocer nuestra postura
ante el proyecto del Consell, la primera la dimos el pasado 3 de
agosto en Alacant, en el Hort Comunitari de Carolines, y estamos
cerrando otras más (7 de septiembre en el centro social Isla de cuba
y 10 de septiembre en la asamblea de Stop-Desahucios, ambas también
en Alacant). Charlas que, junto a las concentraciones que llevaremos
a cabo en el tiempo en que la comisión esté activa, pretenden
potenciar el debate ciudadano sobre la necesidad de la implantación
de la Renta Básica.
La
charla se basa en una comparativa entre la Renta garantizada de
ciudadanía, ley en vigor, el Anteproyecto del Consell y la propuesta
que hacemos desde la Assemblea, para evidenciar que el Anteproyecto
aunque mejora en algunos aspectos la ley actual no representa un
cambio respecto a la misma pues trata, como hace la RGC, la pobreza y
la exclusión como problemas individuales de falta de adaptación a
la realidad que nos oprime y no como problemas sociales fruto del
desigual reparto de la riqueza. Por ello tanto la RGC como el
Anteproyecto no son propuestas emancipatorias, sino herramientas para la gestión y control de la pobreza.